PJ Canon

Robert Fox es el gobernador indiscutido de Nemereth, logra imponerse sobre cualquiera que lo desafíe en su reino, demostrando su fortaleza y valía.
Robert, al contrario de su pueblo, no odia Nemedur, sólo cumple un papel fundamental para entidades superiores a las que representa al gobernar: La orden Filum Umbra. Sobre cómo llegó a ser miembro de esa orden, todo forma parte de su pasado, al que le debe su título y sus dominios.
Robert nació hace 36 años, su abuelo era el gobernador de Nemereth en aquel entonces, un hombre de porte respetuoso e imponente: Aberade Fox; Este hombre se enfrentó, a lo largo de su vida, a los reinos de Nemedur, debido a que él fue uno de los niños traidos desde la Tierra para repoblar la nueva colonia que (planeaban) crear en Nemedur. Aberade, a pesar de que la Tierra estaba casi muerta, amaba su hogar y añoraba regresar a él. Así, motivado por sus deseos y sus superiores, luchó por todo el Nuevo Mundo incansablemente, sin permitirse dudar ni justificar sus fallas. Por esto fue llamado "Pistolero de Lodo" (el origen de su sobrenombre se remonta a una estrategia en la que emboscaron a sus enemigos por pantanos). Luchó hasta perder una pierna en combate. Desde entonces fue elegido gobernador, y dedicó casi toda su vida al plano bélico... Casi toda, hasta que nació Robert.
En ese momento Aberade, sin permitirle rechistar al padre de Robert (James Fox, un hombre tímido y de personalidad débil que nunca lograba imponerse, mucho menos ante su padre), decidió dedicar la mayoría de su tiempo a criar al recien nacido. Desde que lo vió nacer Aberade aseguró que Robert sería la antorcha que guiaría a la enceguecida Nemereth hacia la victoria absoluta.
Desde que Robert tuvo uso de conciencia, siempre recordó y vió a su abuelo como un maestro, un guía y, sobre todo, un padre. Robert siempre despreció a su propio padre; Se trataba de un hombre débil, sin sangre en las venas, así se dejó llenar la cabeza por su abuelo hasta que sólo tuvo ojos para él. Su abuelo le enseñó que siempre debía permitirse desconfiar, no dudar frente a los acontecimientos de la vida y, sobre todo, aprender a ver más allá de lo que los demás veian.
Así, Robert nunca estuvo de acuerdo con lo que intentaban imponerle e inculcarle: Odiaba la religión, no podía creer que otros dejaban llamarse "Ovejas" de un pastor que nisiquiera veían. Él no se consideró nunca el borrego de nadie, salvo tal vez de Aberade. Tampoco entendía el patriotismo de aquellos Nemerianos nacidos en Nemedur en relación a la Tierra, ¿Qué sentido tenía defender y amar a una tierra que nunca vieron? ¿Con qué objeto obedecían a todo lo que los mayores intentaban imponerles sin pensar? Así, todos los jovenes parecían monotonos, por eso siempre le costó confiar en otros y crear amistades; A todos los considera idiotas y poco fiables.
Robert, en cambio, siempre sintió pasión por Nemedur: Si no querías escuchar a nadie que te diera ordenes, simplemente te ibas a un pueblito tranquilo de Primith o a un campo de Atma. Si querías estudiar o entrenar, debías ir a Ehren o a Lizeorion. Si, en cambio, te gustara trabajar para la tierra, podrías ir a Asharot. Y si quisieras aprender sobre negocios, Bestore era tu lugar. Todo estaba allí, en ese hermoso mundo, para él, por lo que en su juventud y adolescencia se dedicó a viajar. También en estos tiempos su abuelo (quien descnocía su pasión por los reinos de Nemedur) le dió un nuevo pasatiempo: La orden Filum Umbra.
La tarea de esta orden era sencilla: Poner todo Nemedur bajo los dominios de Nemereth y, por ende, de la Tierra. Robert era el miembro más joven que jamás pisó la orden, y sin embargo se trataba de uno de los mejores: su dominio sobre las armas de fuego y su elocuencia lo convertían en un miembro muy utilizado. El líder de la orden, Aberade, se encargó de darle un entrenamiento riguroso; Por esto, Aberade le prometió que algún día sería la cabeza de la orden, el sucesor de su sucesor: Dermot Badcock.
Sin embargo, Una de las tantas tardes de lluvia tóxica de Nemereth, Robert recibió un mensaje de su abuelo Aberade para que fuera a su oficina para un entrenamiento. Al llegar fuera de su oficina y tocar la puerta escuchó un disparo en su interior, por lo que entró en el despacho de su abuelo para comprobar, con terror, que el cobarde de su padre le había disparado a Aberade en su pecho. Robert, furioso, desenfundó su revolver disparó a la cabeza de su padre, dandole muerte de inmediato. Aberade, al ver la reacción de su nieto y comprender que ya era muy viejo, le quitó su revolver y esperó a que llegaran los guardias, mientras le pedía a Robert que cumpliera su último deseo: volver a abrir el portal de la Tierra. Al llegar los guardias vieron muerto a James en el suelo frente a Aberade, quien sostenían un revolver apuntandole mientras decía "Al fin acabé con ese inútil que intentó matarme", acto seguido se voló la cabeza, limpiando el nombre de Robert.
Robert quedó libre de sospecha, y luego del funeral de su abuelo Dermot tomó el mando de Filum Umbra, y, por su actitud, dió a entender a Robert que nunca le daría el puesto... No mientras siguiera con vida. En cambio, fue designado como nuevo gobernador de Nemereth, suplantando a su padre, a quien su pueblo odió siempre.
Robert demostró ser aún más estricto, efectivo e imponente que su abuelo, por lo que ganó rápidamente el respeto de su pueblo. Y, aunque deba guardar apariencias, aún hoy ansía ser el líder de Filum Umbra, antes de que Nemedur, su amor secreto, sea destruido.

El maestro Loa es, si se lo puede llamar así, la máxima autoridad de Primith. Debido a que es un monje su deber no es mandar ni ordenar, sino sugerir y guiar a los aspirantes a monjes dragonarios. Debido a esto, el vuelve de su forma de dragón a la humana continuamente.
Es muy respetado en Primith, pero lo cierto es que en realidad solo se conoce su nombre: Loa, los monjes con autoridad suelen estar desligados de asuntos terrenales, como los negocios o la familia. Sin embargo, el misterio que rodea a su pasado tiene una razón de ser: Loa nació en una época turbulenta, en las montañas de Primith, montañas que los monjes habían amado y respetado desde el nacimiento del Máximo Templo de Primith; Sin embargo, ellos ya no tenían derecho sobre estas: Bestore, Atma y Nemereth se disputaban continuamente su dominio, por lo que se quemaban y destruian los pueblos y templos para convertirse en fortalezas guarecidas por soldados aterrados por la fragüa de la guerra.
Loa, si bien nació y se crió los primeros 10 años de su vida en un templo, una noche nevada debió escapar de su hogar: Unos soldados sin bandera habían ingresado en el templo y, hambrientos y muertos de frío, dieron muerte a todos los monjes para "adaptar" su nuevo refugio. El maestro de Loa, Yusho, había escondido a este en un desagüe y le pidió que huyera, muriendo luego frente a él, asesinado a manos de 2 soldados novatos, que luego persiguieron a Loa por la montaña, sin éxito en su cazería.
Loa llegó luego a un pueblo lleno de refugiados y soldados ehrenianos, por lo que Loa se extrañó, debido a que Ehren, supuestamente, no formaba parte de ese conflicto. Más tarde averiguó el porqué: Ehren respetaba muchísimo a Primith y a sus monjes, por lo que ingresaron en la guerra para detenerla, refugiando y cuidando al pueblo de Primith. Ehren se encontraba en ese pueblo en una tarea específica: estaban llevando a cabo una ejecución de soldados, entre los que, en la horca, Loa reconoció a los novatos que asesinaron a su maestro. Loa vió en casi todos los soldados rostros jovenes, no mucho más adultos que él mismo. Tal vez algunos no tuvieron opciones, por lo que Loa decidió, desde ese momento, que no daría muerte a nadie, y menos tan joven.
Fue llevado al Máximo templo de Primith por unos monjes que estaban escapando del conflicto, y allí pasó casi toda su vida, entre monjes y habitantes de los pueblos vecinos arrazados.
Allí conoció a su primer y único amor, una pueblerina, compañera de sus travesuras y aventuras, con quien más tarde contrajo matrimonio frente al Gran Dragon Celeste. Esta unión le trajo una hija cuando el contaba 45 años, en ese entonces ya Ehren había detenido el conflicto y había devuelto casi todas las montañas a Primith; Los pueblos y templos estaban volviendo a levantarse, y la paz volvía a reinar no solo en esas silenciosas montañas, sino también en los corazones de sus habitantes.
Pero las penurias de Loa no terminaban allí: Una noche oscura un grupo de hombres con arcania misteriosa ingresó en el pueblo en el que habitaba en búsqueda de un viejo amigo suyo: Mandus Wood. Si bien Mandus Wood no se encontraba en su casa, sino de viaje, los guerreros sabían que el pueblo ocultaba algo.
Furiosos, obligaban a los habitantes del pueblo a que revelaran el paradero de Mandus Wood, y finalmente llegó el turno de la familia de Loa. Loa desconocía su paradero, pero los soldados de negro no se conformaron: frente a él ejecutaron a su esposa, y su hija, aún bebé, fue raptada y llevada junto con muchos niños a un lugar aún desconocido para él el día de hoy. Acto seguido, incendiaron la aldea, dejando a Loa como uno de sus pocos supervivientes. Nunca más volvió a ver a su hija, a los soldados de negro ni a Mandus Wood, quien al año se lo dió por desaparecido y muerto.
Tras todo esto Loa decidió que era una señal del reino celeste, por lo que volvió a sus origenes y se convirtió en monje, borrando su apellido de todas sus presentaciones: se había convertido en, simplemente, el maestro Loa.
Estos sucesos tuvieron lugar hace 82 años, por lo que el maestro Loa, a pesar de su apariencia juvenil y enérgica, cuenta 127 años. Loa es muy jovial y divertido, le gustan los chistes y casi siempre sonríe, además es muy sabio y parece que siempre sabe qué decir. Pero lo cierto es que por dentro no pudo olvidar ni a su esposa ni a su hija, quienes aun viven en su corazón.

Remedí Ornleblas es la administradora de la Junta Directiva de Lizeorion, el puesto más alto que se puede alcanzar en ese reino. A pesar de ser tan joven, demostró un excelente juicio y análisis de las situaciones, además de una rápida toma de desiciones, casi siempre muy efectivas.
Debido a que trabaja en un ambiente de gran agotamiento mental, vive un poco dormida y cansada, salvo en el trabajo, donde pone todo su potencial y atención.
Sin embargo, Remedí no sólo tiene el trabajo y la administración de su reino en la cabeza: tiene un amor prohibido, un amor que se remonta a un episodio traumático de su infancia.
Durante el período en el que tuvo lugar su niñez, ocurrió un conflicto entre Bestore y Asharot, en el cual Lizeorion y otros reinos se vieron envueltos como intermediarios diplomáticos. Lizeorion estaba decidido a resolver el conflicto debido a que su mayor punto de cruce ocurría en las Montañas de Cobre, el Bosque de Plata y el Río de Oro, maravillas naturales que Lizeorion y Asharot compartían en sus fronteras y que Bestore estaba tentado a saquear, aprovechando sus riquezas.
El padre de Remedí, Gramzo Ornleblas, era uno de los miembros de la Junta Directiva encargado de la diplomacia, pero sin embargo tenía una excelente relación con su hija, por lo que esta solía acompañarlo en sus misiones de paz, en caravanas que, teoricamente, no deberían sufrir ataques.
Sin embargo, en la famosa Caída de las Montañas de Cobre, batalla en la que participaron 5 reinos (Bestore se enfrentó a Lizeorion y Asharot, mientras Ehren y Atma hicieron más tarde su intervención, deteniendo la batalla que dejó en penurias las Montañas de Cobre), la caravana de Gramzo sufrió una emboscada a manos de Bestore, en donde redujeron velozmente a los pocos guardias y, al descubrir el pelotón de Bestore que se trataba de una misión de paz, decidieron no dejar sobrevivientes que denunciaran su error, por ende se propusieron a ejecutar a los viajeros restantes, Gramzo en primer lugar.
De esta manera, Gramzo fue ejecutado frente a Remedí, quien, si bien tenía los ojos vendados, escuchó los gritos de dolor y agonía de su padre, algo traumático para una niña de apenas 11 años. Así fueron ejecutando uno a uno, hasta que llegó el turno de Remedí; Los bestorianos dudaron si debían ejecutar a una niña pequeña, pero las órdenes del líder de pelotón eran claras: Ningún sobreviviente.
Pero Remedí fue salvada justo antes de ser degollada, debido a que los bestorianos sufrieron una emboscada en la que se vieron obligados a replegarse y abandonar su empresa. En la batalla la venda que cubría los ojos de Remedí se resbaló y cayó, por lo que en el suelo pudo ver a sus salvadores: Era un pelotón de Ehren, del cual su líder se vió atraído por los gritos de agonía de los ejecutados.
Remedí descubrió el amor verdadero al ver al líder del poderoso pelotón ehreniano acercarse sobre su caballo blanco: Era un joven, no debía tener más de 25 años, de cabello castaño claro y corto, ojos avellana, sin vello facial, cuerpo entrenado y piel caucásica, curtida por la batalla y la selva de Ehren.
Este joven capitán la levantó en brazos y le preguntó, calmada y suavemente, mirandola a los ojos, a que reino respondía y por qué estaba en ese lugar tan peligroso; Remedí, entre el trauma por la muerte de su padre y la impresión que le había causado su interlocutor, no pudo gesticular palabra, sólo pudo decir "Li-Lizeorion...".
El joven ordenó al pelotón a retirar a los sobrevivientes fuera de la zona de peligro, hacia un pueblo de Lizeorion cercano, tras lo cual montó en su caballo a Remedí y la escoltó personalmente; Remedí se sentía en el limbo, entre el sueño y la pesadilla, perdida en sus maquinaciones mentales, por lo que no fue muy conciente acerca del viaje. Sólo recuerda su llegada, en la que el capitán ehreniano desmontó de su caballo y la ayudó a bajar; Acto seguido le pidió asilo a unos aldeanos para los refugiados de la guerra, ofreciendo un poco de oro. Después los tranquilizó en general, y luego se dirigió exclusivamente a ella, diciendole con una sonrisa tranquilizadora "No te preocupes, aquí estarás a salvo, detendremos esta guerra, te lo prometo...", y palmeó su cabeza; Remedí aun recuerda el calor de su mano. Finalmente, se montó en su caballo, dió la orden y todos en su pelotón obedecieron velozmente, retirandose a galope rápido devuelta al combate.
Remedí fue creciendo entre lujos pero sin el amor de sus padres (Su madre había muerto al darla a luz), por lo que se convirtió en una joven rebelde, para la cual era muy normal tener juntas desagradables. En cuanto al plano amoroso, estaba resentida, debido a que cada noche soñaba con el capitán ehreniano desconocido (al que no volvió a ver), por lo que intentó por muchos medios sacarselo de la cabeza, incluyendo prácticas homosexuales, pero nada podía lograr que lo olvidara.
Cuando cumplió 18 años se le ofreció, por cortesía y por honor al nombre de Gramzo, ingresar en la Junta Directiva como miembro honorario. Remedí estuvo apunto de declinar la oferta, pero recordó los gritos de agonía de su padre, por lo que no pudo negarse. Desde entonces viajó por el mundo en ceremonias diplomáticas (en las que, por cierto, no creía ni una palabra) y otros tipos de ceremonias importantes.
Pero hubo un viaje en que su vida volvió a redireccionarse: La ceremonia de coronación de Ehren. Si bien Remedí se mostró indiferente en el viaje, no podía negar que por dentro la mataba la ansiedad: Tal vez podría ver al capitán ehreniano, si es que no hubiese muerto. Durante el viaje le explicaron que el anterior rey había muerto de depresión, al enterarse que su segundo hijo había asesinado al heredero del trono accidentalmente, pero que, sin embargo, la última petición del difunto rey fue que su segundo hijo, Merceron, tomara el trono, debido a que creía que sólo él sería capaz de dirigir a Ehren de nuevo a la grandeza.
Durante la ceremonia Remedí se encontraba muy cerca del trono vacío en el que el príncipe Merceron sería presentado, pero poco le importaba el futuro rey: Buscaba entre los generales y capitanes a su amado.
Al no encontrarlo entre los presentes se resignó, deprimida, y pensó que su amado habría muerto en combate. Justo en ese momento anunciaron la presencia de Merceron, por lo que, sin más, Remedí contempló al nuevo rey. Su reacción fue garrafal: Se quedó completamente muda al ver al joven capitán con una suave y atractiva barba, el cabello largo y algunas heridas más, pero aseado. Sin duda: El nuevo rey, Merceron, era aquel capitán con el que todas las noches soñó y nunca olvidó.
Al presentarse todos los representantes de los reinos ante él y darle sus respetos y su buena suerte, Remedí a duras penas pudo gesticular un tímido " B- Buena suerte! " e imitó a los demás miembros de la Junta Directiva dándole la mano; Un error, ya que las mujeres normalmente daban un beso en cada mejilla, pero ella no lo notó, estaba concentrada en su mano: la fuerte y cálida mano que la salvó y le dió fuerzas para seguir. Finalmente se volvió tímidamente hacia su asiento, sonrojada, a lo que Merceron levantó una ceja, extrañado.
Remedí no perdió el tiempo: a los comandantes y capitanes preguntó acerca de los gustos, manías y actitudes del nuevo soberano: Todos afirmaron que era muy bueno en combate, muy inteligente, amable y compasivo, y que sobre todo apreciaba la inteligencia y la bondad.
La vida de Remedí tomó un nuevo camino: Desde ese día se esforzaría por ser la más inteligente y bondadosa. Al volver al reino pidió ayuda a Moshter Radian, un viejo amigo de su padre y miembro de la junta que siempre se había visto preocupado por su educación y salud. Moshter, un hombre mayor muy bondadoso y simpático, accedió a ayudarla y tomarla como discípula, pero conocía sus intenciones: No había visto a Remedí tan alterada desde la muerte de su padre, por lo que dedujo velozmente sus sentimientos por Merceron.
Remedí recibió entrenamiento físico, estudios, valores y modales de parte de Moshter, por lo que no tardó en realizar la ceremonia dragonaria del Huevo Azul, sorprendiendo a todos en la Junta Directiva. En poco tiempo se convirtió en un miembro vital de la junta, demostrando que en sus venas llevaba la sangre de su padre. A los 22 se le dió el puesto de Administradora por votación, ya que no se podía negar su capacidad diplomática, logística y distributiva.
Desde entonces se encarga de mantener una relación lo más estrecha posible con Ehren y, más personal, con el rey Merceron, acompañada siempre del cómplice Moshter, su maestro, quien no puede evitar divertirse con lo complicado de los objetivos de Remedí, a lo que esta se sonroja y enoja.
La vida de Remedí tomó un curso inesperado: dejó de frecuentar sus antiguas amistades y demuestra, cada día más, que está a la altura de cualquier eventualidad que pueda surgir, no sólo motivada por su amor a Merceron, sino además por el amor a su vocación y a su reino.

Dermot Badcock fué sujeto de prueba de un proyecto trágico que, se creía, fué un total desastre: El proyecto "Niños platino". Dermot fue uno de los 69 bebés que nacieron de una manera planificada y meticulosamente estudiada.
Sus padres sólo se conocieron en el coito: Fueron elegidos de manera que sus genes, en algunos aspectos superiores si se combinaban, fueran transmitidos en un niño superior. Por esto Dermot, en realidad, tuvo muchos hermanos sin nombre, los cuales fueron "deshechados" al no cumplir las mínimas espectativas de los médicos y encargados del proyecto.
Al nacer, Dermot recibió su nombre que, en el idioma antiguo de Nemedur, se puede leer como Derumotoh, y traducir como "Veneno" o "Nocebo" pero en un plano de uso médico.
Dermot, junto con los otros 68 niños, fue entrenados incluso desde antes de nacer: a su alrededor ponían discos de música clásica para que se desarrollara su inteligencia cognitiva. Al nacer fue separado de sus padres, nunca conoció ni los brazos ni el pecho de su madre, fue directamente enviado a una incubadora.
Así, desde el primer día en que abrió los ojos, fue preparado para una misión: reabrir los portales y gobernar Nemedur.
Fue entrenado en todos los aspectos posibles: físico (resistencia ósea y muscular, velocidad, reflejos, etc.), mental (inteligencia cognitiva y deductiva, observación, etc) y en el plano bélico (en el caso de Dermot, es un excelente francotirador, pistolero y manipulador de explosivos).
Sin embargo el proyecto fracasó: los "niños platino" no pudieron tolerar psicológicamente la carga que les impusieron desde su nacimiento: Su vida no era su vida, nadie realmente los apreciaba como seres humanos, sino como armas.
Uno a uno, los niños platino se fueron suicidando, debido a que no podían huir. Unos pocos se rebelaron. Sin embargo, Dermot era la última esperanza del proyecto, debido a que fue la parte "exitosa" de este, sólo que nadie lo sospechaba o imaginaba siquiera por un simple motivo: Dermot fue quien guió la rebelión de los niños platino.
Los médicos y científicos habían creado en Dermot precisamente lo que buscaban, alguien que pudiera y quisiera gobernar sobre todas las cosas, alguien que no se detuviera ante nadie ni se dejara aprisionar. Precisamente ese fue su error, Dermot nunca se permitiría tener que responder ante alguien, mucho menos ante sus creadores. La determinación lograda en Dermot era enfermiza: Él, a diferencia de sus "compañeros" (a quienes en realidad mira como subditos y herramientas), tenía una razón de existir: algún día todo y todos estarían bajo su mando y dominaría, como sea, el mundo. No importaba lo que tuviera que hacer, su cerebro estaba lavado y no le importaba.
Al completar la rebelión de una manera exitosa, sus compañeros decidieron darle el puesto del líder de los niños platino, cuyo grupo solo poseía 4 supervivientes: Lucius Carm, Noé Surface, Amily Lionside y el mismo Dermot Badcock. Al salir de los laboratorios, los únicos 4 supervivientes salieron con una esperanza: lograr la libertad. Dermot logró convencerlos de que la única libertad que podrían lograr sería en la cumbre de la sociedad, donde nadie pudiera darles órdenes; También los convenció de que ese objetivo, para ellos, era posible, debido a sus capacidades físicas y mentales y a sus amplios conocimientos en el campo bélico.
Fueron realizando misiones como un grupo comando en no0mbre de Nemereth a lo largo del mundo: Asesinatos, capturas, secuestros, robos, destrucción de edificaciones, etc.
En estas misiones el grupo se fue uniendo y se crearon lazos: Lucius miraba como hermanos a Dermot y a Noé, aunque sentía cierto desprecio por Amily, debido a su falta de determinación; Noé formó una relación amorosa con Amily, y fue recíproco a los sentimientos de Lucius; Amily estaba enamorada de Noé, pero desconfiaba de Dermot y Lucius, sobre todo de este último, quien no simulaba su falta de empatía hacia sus sentimientos: No le gustaba asesinar gente; Dermot, en cambio, sólo simulaba: no siente aprecio por nadie en este mundo ni en ningún otro.
Pero a pesar de todo, Dermot realmente detestaba a Amily por sus actitudes traidoras y su falta de determinación. Llegó a la conclusión de que no tardaría en transmitir esos sentimientos a Noé y el grupo, que tanto le había costado armar, se desmoronaría y sería aún más complicado ingresar a su objetivo: La orden Filum Umbra, aquella que tenía poder sobre Nemereth y anhelaba el poder sobre todo Nemedur.
Dermot maquinó un plan en el que pidió asistencia a Lucius: Tendría lugar en una misión hacia Asharot dada por Filum Umbra como último requisito de ingreso, en la que Lucius se haría pasar como arquero del escuadrón Lluvia Plateada (el escuadrón de arqueros de élite y reconocimiento de Asharot) y daría información acerca del grupo "infiltrado" restante. Supuestamente, serían capturados como prisioneros para obtener información y así lograrían infiltrarse en los cuarteles de Asharot; Lucius luego los liberaría y escaparían con la información. Pero el plan completo era otro: Lucius dió muerte a Amily de un flechazo y sin ser visto, finjiendo que fue parte de la maniobra adoptada por el grupo para capturarlos.
La misión fue un completo éxito: Amily murió sin que el apesumbrado Noé sospechara de sus compañeros, y así, ingresaron en Filum Umbra bajo el ojo analítico de Aberade Fox, su líder. A Dermot poco y nada le importaba de quien se trataba, su objetivo era claro: ser el líder de aquella organización que tan cerca estaba de ser la que gobernara Nemedur.
Lucius seguía ciegamente a Dermot, pero Noé parecía desconfiar de su liderazgo. Para colmo, Noé era el favorito de Aberade para sucederlo en el mando. Por esto, Dermot tomó una desición: En una misión de la orden lo ejecutó a traición con un certero disparo en la arteria carótida común, y Noé, moribundo, escuchó los planes y maquinaciones de Dermot, quien también confesó su plan contra Amily. Noé murió con el horror dibujado en su rostro; Más tarde Dermot reportó a Noé Surface como caído en acción.
De esta manera Dermot quedó sin trabas en su pleno ascenso hacia la cumbre de Filum Umbra, o eso creía: Ahora era Lucius quien desconfiaba de él, ya que dudaba sobre las causas de muerte de Noé.
Dermot sentía un pleno odio y asco hacia Aberade y su nieto: Robert Fox, un muchacho pretencioso que quería quedarse con el mando de la orden. Por esto maquinó otro plan en el que utilizó a James Fox, padre de Robert, un sujeto de temple debil y fácilmente manipulable, con quien "trabó amistad" secretamente, para luego convencerlo de que la única manera de recuperar a su hijo era asesinando a Aberade, para así demostrar su fortaleza y valía, características que Robert apreciaba. Dermot le aseguró a James que nadie intervendría en su plan, sin embargo, envió un mensaje (en nombre de Aberade) a Robert para informarle sobre un entrenamiento que tendría lugar en su oficina, justo a tiempo para que viera como James asesinaba a Aberade.
Dermot estaba seguro de que los sentimientos negativos predominaban en el interior de los seres humanos y en sus impulsos, por lo que dedujo que, al ver el asesinato de su abuelo, o Robert asesinaría a su padre (descubierto por los guardias luego, por lo que sería apresado y sacado de la competencia) o James asesinaría a Robert, en el temor por haber sido descubierto; Simplemente no perdía en ninguno de los dos casos. Sin embargo, Aberade se sacrficó por su nieto, echando a perder, en parte, los planes de Dermot.
Sin embargo, Aberade había dejado claro que su sucesor era Dermot, y, el de Dermot, sería Robert. De este modo Dermot se convirtió en el líder de Filum Umbra, y delegó a Robert como gobernador en reemplazo de su padre.
Así, Dermot está cada vez más cerca de lograr su cometido, demostrando constantemente su inteligencia y cuán peligroso puede llegar a ser. Predominan en él la desconfianza, el odio y el asco hacia todo el mundo, al cual desea esclavizar.
Dermot no retrocede ante nada: disparos, explosiones, cortes, golpes, todo eso lo ha sufrido en la carne y no ha hecho más que esbozar una sonrisa, divertido y ansioso por dar muerte a todo lo que lo rodea. Poseé una extraña afición por la música clásica, a la cual relaciona con la muerte y destrucción que lo rodea.

Lucius Carm es el compañero y hombre de confianza de Dermot Badcock, sin embargo, se maneja con su propia autonomía dentro de la organización de la que forma parte: Filum Umbra.
Fue uno de los 69 "niños platino", peligroso proyecto creado por una ONG desconocida de Nemereth que buscaba crear super soldados capaces de dominar tanto Nemedur como la Tierra.
Durante su dura infancia, repleta de entrenamientos de todo índole, logró forjar una amistad con Noé Surface, a quien consideró siempre el hermano que nunca vió nacer. Con el tiempo conoció y forjó amistad también con Dermot, en quien, a pesar de su frialdad, confiaba ciegamente.
Al cumplir los 16 fue uno de los niños platino que se reveló, comandados por Dermot, contra el proyecto y sus creadores. Los único supervivientes fueron Lucius Carm, Dermot Badcock, Noé Surface y Amily Lionside, por quien Lucius nunca sintió mucha simpatía, puesto que distraía a Noé con sentimentalismo innecesario.
Más allá de todo lo que sentía por sus compañeros, Lucius siempre tuvo un gran ansia de poder y una necesidad de comprobar su propia existencia. El creía que podría lograrlo poniendose en situaciones increiblemente riesgosas y obligando a los demás a reconocerlo y respetarlo como a un gran señor; Por esto estuvo de acuerdo en elegir a Dermot como líder, pensó que, bajo su guía, lograría llegar tan lejos como se lo proponga, y lo haría brillar por sobre todos los demás. Por eso era que, siempre que Dermot le daba una orden o sugería qué podía ser lo mejor para la familia, Lucius obedecía. Todos fueron guiados por Dermot dentro de una organización criminal secreta y con mucho poder de Nemereth: Filum Umbra.
Finalmente llegó el momento de cumplir una misión que Lucius estaba esperando: asesinar a Amily, orden directa de Dermot, puesto que creía que la falta de determinación de Amily llevaría a todo el grupo, sobre todo a Noé, a la ruina. Lucius obedeció con placer, pero luego se arrepintió de asesinar a Amily con sus propias manos. Esto fue por las reacciones de Noé: comenzó a demostrarse muy taciturno, y parecía ya no sentir lo mismo por sus compañeros ni por nadie.
Por esto sucedió lo que Lucius temía: en los momentos que más se necesitaban, Noé comenzó a distanciarse de sus compañeros de toda la vida y comenzó a acercarse más a los demás miembros de la orden y particularmente a su líder, Aberade Fox.
Lucius, a pesar de sentirse mal por su desición, no pudo evitar pensar que realmente merecía lo que le estaba sucediendo, por lo que tomó la desición de que, en el momento más apropiado, confesaría a Noé su error y cuán arrepentido estaba. Pero este momento nunca llegó: en una misión dada por Aberade para Dermot y Noé, este último murió, según el informe de Dermot, en manos del enemigo.
Lucius no pudo evitar notar la similitud con el caso de Amily, por lo que optó por investigar la muerte de Noé, para descubrir, horrorizado, su cadáver (muy bien escondido en una cueva cercana al lugar de los hechos) muerto por desangramiento producto de un disparo en la arteria carótida común.
Lucius no era tonto: sabía que los demás habitantes de Nemedur (salvo los nemerianos, que no tenían nada que ver con esa misión) no tenían los suficientes conocimientos para manejar las armas de fuego... Dermot fue el único que pudo haberlo hecho; Aparte de esto, tenía un móvil más que suficiente: su ansia de poder y el anhelo por el liderazgo de Filum Umbra... Puesto para el que Noé era el mejor candidato.
Lucius enfureció, desconfiaba profundamente de Dermot, no quería creer que su compañero de toda la vida fuera capaz de un acto tan ruin, pero las pruebas hablaban por sí mismas, Noé había sido asesinado por el arma de Dermot, y este parecía enceguesido por el ansia de poder, a Lucius no le quedó la menor duda en que no dudaría en asesinarlo a él también si conseguía suficientes motivos.
Finalmente Dermot consiguió el liderazgo de Filum Umbra y Lucius era su mano derecha... Pero los medios por los que lo logró eran también motivo de desconfianza. Finalmente, Dermot solicitó la asistencia de Lucius para asesinar a Robert Fox, nieto de Aberade y próximo heredero al puesto de líder de Filum Umbra, misión que Lucius no piensa cumplir: Robert es el único que puede detener al monstruo en que Dermot se ha convertido, y de ser necesario, prestara su ayuda a este para que lo logre...

Moshter Radiam está en proceso de diseño.
M.B.

Urus Steilan está en proceso de diseño.
M.B.

Ky Morums está en proceso de diseño.
M.B.

Titania Bloomadur está en proceso de diseño.
M.B.

Leiny Dolenson está en proceso de diseño.
M.B.